75 Festival de Cannes: el año de la guerra
En el segundo año post COVID-19 el Festival de Cannes vuelve con más ganas que nunca. Las necesarias medidas sanitarias que obligaron a los no vacunados a continuos tests y la clamorosa menor afluencia de festivaliers procedentes de América y Asia no se repetirá, pero sí el sistema de reserva de entradas que este año a diferencia del anterior está causando tremendos problemas de logística a los periodistas acreditados. El jurado de la Sección Oficial, presidido por Vincent Lindon está formado por Rebecca Hall, Deepika Padukone, Noomi Rapace -presente el año pasado con Lamb (Valdimar Jóhannsson, 2021), Asghar Farhadi -ganador exaequo del Grand Prix en 2021 con la recientemente envuelta en polémica A Hero-, Ladj Ly -cuyo debut en el largometraje, Los miserables, compartió en 2019 el Grand Prix con Bacurau-, Jeff Nichols y Joaquim Trier -que en la anterior edición logró para Renate Reinsve el premio a la mejor actriz por La peor persona del mundo. Seguir leyendo.
English version, here.
El Festival de Cannes homenajea de Tom Cruise, Forest Whitaker y Agnès Varda.
Las películas que se proyectarán este año fuera de competición están encabezadas por Top Gun: Maverick (Joseph Kosinski, 2022), la secuela de la icónica cinta que llegará de la mano de Tom Cruise, quien ya estuvo en el Festival el 18 de mayo de 1992, presentando Un horizonte muy lejano, deRon Howard en la sesión de clausura de la 45 edición y entregando la Palma de oro a Bille August. Treinta años después, justo el 18 de mayo de 2022, recibirá un premio de homenaje a toda su carrera. El Festival también homenajeará a Forest Whitaker, invitado de honor que recogerá el testigo de Jodie Foster, quien lo recibió en 2021. Por otra parte, el Festival de Cannes ha anunciado la decisión muy bien recibida de cambiar el nombre de la Sala Soixantième por el de Agnès Varda. Seguir leyendo.
Coupez!, los zombies inauguran el 75 Festival de Cannes
El 75 Festival de Cannes fue inaugurado por el filme de Michel Hazanavicius Coupez!, que llegó precedido por el hype que creó el cambio de su título anterior (Z) para no parecer alinearse con los ocupantes de Ucrania. Precisamente, esa mirada fija sobre los demás y la búsqueda del crowdpleaser han dirigido la filmografía del director francés. Trabajar la serie Z con los medios y las intenciones (sobre todo) de un filme que pretende arrasar en taquilla complaciendo al mayor común denominador es en sí mismo un proyecto que nace muerto. Basándose en la película japonesa Out Cut of the Dead (2017), el director de El artista(2011) filma un rodaje dentro de un rodaje, con sorpresas y falsos planos secuencia, que divide en dos partes, la primera es un gancho y la segunda es el making of, donde lo que vimos se descubre que no es lo que creíamos. Seguir leyendo.
English version, here.
Monumental Esterno notte
Desde su primer largometraje I pugni in tasca (1962) el director italiano Marco Bellocchio ha recorrido casi seis décadas de la historia de cine y de Italia, demostrando una vitalidad creativa y una madurez fructífera, que le han impedido acomodarse en los logros formales e ideológicos tan característicos de su filmografía. Si en la reciente Il traditore (2019), estrenada en Cannes celebrábamos precisamente esa combatividad patente en ambos campos, tras ver proyectada fuera de competición su miniserie de 6 episodios Esterno Notte (2022) no nos queda más que proclamar un nuevo capolavoro sobre el secuestro de Aldo Moro, que durante más de cinco horas nos ha seducido e hipnotizado. Seguir leyendo.
Le otto montagne: la medida de la amistad
Le otto montagne, dirigida por Charlotte Vandermeersch y Felix Van Goreningen es una bella película ambientada en el norte de Italia, que trata el tema de la amistad a lo largo de la infancia y la juventud, envuelta en el contexto de los años ochenta, entre niños de diferentes extracciones sociales. La historia narra la llegada de un niño de 12 años con sus padres para pasar el verano en las montañas del valle de Aosta. Adaptada de la novela de Paolo Cognetti que obtuvo el premio Medicis en 2019, describe la relación en un edén que siendo cotidiano para Bruno, es un paraíso inesperado para Pietro. Seguir leyendo.
Festival de Cannes: Armageddon Time, coming of age en la era Reagan
James Gray emprende un proyecto largo tiempo meditado en Armageddon Time. Parcialmente autobiográfica, la película indaga en la dinámica familiar de un adolescente de sexto curso, de ascendencia judía, cuyo núcleo más cercano mantiene la cohesión y se esfuerza en que siga vivo el recuerdo de los ancestros. Paul Graff (Banks Repeta), de once años, crece en Queens en un hogar alienta el sueño americano y busca el mejor porvenir para sus hijos. La presencia de los familiares más ancianos perpetúa la memoria de la búsqueda de la felicidad y la prosperidad, sin que la tradición sea una rémora. Por eso el personaje del abuelo, interpretado por Anthony Hopkins es un ejemplo en su modo de transmitir los valores (Sé un mensch), pero también en la comprensión y la tolerancia hacia los nuevos tiempos. Seguir leyendo.
English version, here.
75 Festival de Cannes: EO, la inocencia de la bestias
El director polaco Jerzy Skolimowsky dirige la fábula EO, de clara inspiración bressoniana, puesta al día, una película de insólita belleza, con imágenes que se quedan grabadas, donde el asno protagonista adquiere cualidades humanas, desde la pasividad de sus diferentes destinos a manos de los hombres. Una gran parte del interés del filme radica en su visión de la naturaleza en la que nos incluye sin distinción, visualmente, EO es un film bello, incluso hipnótico, que juega con las imágenes surreales de bosques y riachuelos, transformados por el tratamiento del color y la fotografía de Mychal Dymek, para expresar sin palabras la deriva de la humanidad. Seguir leyendo.
English version, here.
75 Festival de Cannes: Triangle of Sadness, ricos a la deriva
Ruben Östlund, tras The Square, nominada a los Oscar y ganadora de la Palma de Oro en Cannes 2017, sigue confirmando que su objetivo es sacar los colores a los que se creen moralmente superiores a aquellos que critican o adulan. Las clases sociales o las posiciones de poder de cualquier tipo para Östlund son solo pruebas circunstanciales y estadios efímeros que nos recolocan en la pirámide de los privilegios, por nuestra capacidad económica o nuestro poder de influencia. Demostrar la fragilidad de esa posición en la escala, la volubilidad del mercado y las diferentes monedas de cambio (dinero, belleza, poder) que pueden entrar en juego, así como la debilidad de los principios que la apoyan es una tarea que informa la filmografía del director y que las tres partes de Triangle of Sadness muestran con mayor o menor fortuna. Seguir leyendo.
75 Festival de Cannes: R.M.N. para diagnosticar Europa
Tras Los exámenes (2016), el director rumano Cristian Mungiu vuelve con R.M.N. al Festival de Cannes para diagnosticar a su país, pero también a Europa. En su nuevo filme, ambientado en una comunidad rural de Transilvania, Mungiu amplía su objeto de estudio para analizar la realidad de un mundo en extinción y el nacimiento de un nuevo orden. Con la misma asepsia con que filma un plano fijo de 17 minutos y la distancia aparentemente equilibrada con que permite expresarse a aquellos miembros de la sociedad que representan las fuerzas que lastran el progreso de la humanidad, el director rumano nos ofrece una película sobresaliente que cumple con creces sus objetivos. Seguir leyendo.
English version, here.
75 Festival de Cannes: Holy Spider, crónica negra iraní
Tras dejar al público anonadado con la audacia y sensibilidad que mostró en el filme fantástico Border, su segunda película y primera en ser presentada en el Festival de Cannes —donde obtuvo el premio de la sección Un Certain Regard—, el director iraní afincado en Suecia Ali Abbasi ha regresado con un film de género, en este caso una crónica negra basada en hechos reales, ambientada en su Irán natal. Holy Spider narra la historia de un asesino en serie, Saeed (Mehdi Bajestani) que estranguló a dieciséis prostitutas en la ciudad de Mashhad, entre 2000 y 2001. El móvil del criminal partía de su fundamentalismo, de un propósito mesiánico y redentor, de la necesidad de “limpiar” la ciudad de vicio y corrupción. Seguir leyendo.
English version, here.
75 Festival de Cannes: Decision to Leave, la seducción del misterio
En Decision to Leave, la última película de Park Chan-wook, Hae-Joon, un policía insomne, obsesionado con su trabajo, perfeccionista y minucioso en la cocina, resignado a la abstinencia sexual y a un matrimonio a distancia, mientras trabaja en Busan, se enfrenta a la resolución del misterio de una aparente muerte accidental. La consecuencia inmediata será un vuelco irreversible en su vida. Protagonizada por Park Hae-il y la icónica Tang Wei (Deseo, peligro, 2007), Decision to Leave es un filme de texturas, en el que la atmósfera creada por el director de fotografía Kim Ji-yong resulta envolvente, en ocasiones las habitaciones funcionan como una caja, un contenedor o un pequeño escenario de cámara, que nos obliga a ser conscientes de los límites físicos que acotan a los personajes y sus conversaciones. Seguir leyendo.
English version, here.
75 Festivalde Cannes: Close, el fin de la inocencia
Tras el éxito de Girl en 2018, Lukas Dhont vuelve al Festival de Cannes, esta vez en Sección Oficial, para competir con Close, donde vuelve a colaborar con el guionista con Angelo Tijssens. En su nueva película, narra una historia con múltiples puntos de conexión con su primer film. De nuevo, se sumerge en el mundo de la primera adolescencia, sus protagonistas Rémi (Gustav De Waele) y Léo (Eden Dambrine) son dos niños de trece años, cuya amistad se nos describe en la primera parte de la película de una modo poético y subyugante, tan cargado de sensibilidad como de originalidad. Lukas Dhont consigue de los niños protagonistas una interpretación sobrecogedora, pero también de sus madres, interpretadas por Léa Drucker y Émilie Dequenne (Rosetta). Seguir leyendo.
English version, here.
75 Festival de Cannes: Crimes of the Future, el tormento y el éxtasis
La largamente esperada Crimes of the Future llegó a Cannes con una expectativa auspiciada por su director, que auguraba abandonos de la sala tras las primeras escenas. Los walkouts son todo un clásico en el Festival, una leyenda urbana que ha implicado a directores como Lars von Trier en el pasado y que no se ha cumplido tampoco en esta ocasión para una película que, aunque lleve el mismo título del filme dirigido por el canadiense en 1970, no se trata de un remake ni una continuación, más allá del espíritu que imbuye la filmografía de un mismo autor. Crimes of the Future se abre con una escena-prólogo contra natura que marcará el resto del filme con un tono perturbador, que apela a nuestra imaginación y sobre todo a nuestra visceralidad, y nunca mejor dicho. Seguir leyendo.
Nadie ha publicado ningún comentario aún. ¡Se tú la primera persona!