O de la infinita capacidad del ser humano para fotografiarse realizando un sinfín de estupideces, parte segunda.
Como hemos visto en la anterior entrega del artículo, el selfie no se detiene y promete deleitarnos con nuevas y grotescas variantes como el Bikini Bridge, una imaginativa modalidad femenina consistente en fotografiarse tumbada en bikini, centrándose en el hueco que queda entre la tela y el abdomen, insinuando el comienzo de la zona pilosa (esto me ha quedado muy fino) y de ahí el nombrecito de Bikini Bridge o Puente del Bikini al quedar la tela tensa por las caderas formando una especie de puente entre ambas. Obviamente esto requiere una extrema delgadez y ya se han alzado voces en contra, pues promueve la anorexia entre las adolescentes. Del retraso mental no he leído nada aunque se le presupone.
Existen muchas variantes menores más (el selfie tras salir de la peluquería, de una sesión de maquillaje o el selfie al salir de compras, en la playa, posando con tu mascota, etc.) pues el ser humano es impredecible a la hora de inventar chorradas y sobre todo si es con una cámara en la mano para dejar constancia de su nivel de estupidez. He dejado para el final mi favorita: el Sellotape selfie. Esta novedosa categoría inspirada en la película de Jim Carrey «Dí que sí» («Yes man» en el original), consiste en el autorretrato con la cara llena de cinta adhesiva y completamente deformada. Incluso los hay que añaden diversos objetos al envoltorio facial. Oh sí, simplemente sublime. Es el selfie ideal para practicar en la oficina en esos momentos muertos. Sólo añadir que su página de Facebook SellotapeSelfie ya supera los doscientos mil seguidores.
Queremos señalar también que existen variantes realmente peligrosas, como retratarse conduciendo con el coche en marcha, el denominado Driving selfie o el caso de los denominados selfies olímpicos, promocionados desde la cuenta de Twitter @SelfyOlympics y donde podemos encontrar los selfies más disparatados en una competición internacional por ver quien sube la imagen más estúpida, divertida y/o absurda. En los mentideros de internet ya hay noticias sobre varias muertes de jóvenes tratando de realizar el selfie más arriesgado. Si se dan un paseo por esta galería fotográfica pueden encontrar una serie de ejemplos olímpicos de lo más selecto y grotesco. Aquí también podrán disfrutar de una buena selección de selfies.
¿Está llegando esta moda selfie al final de su vida? Sinceramente espero que así sea, aunque repasando las últimas categorías mencionadas imaginen hasta dónde podemos llegar en esta escalada del autorretrato estúpido. Mientras tanto, vayan quedándose con la moda que posiblemente releve al selfie: el Sleeveface. Prometo documentarme y publicar nuevo artículo sobre el tema, mientras tanto pueden experimentar alguna de las categorías mencionadas. Todos tenemos un rollo de cinta adhesiva a mano…
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