Mala Rodríguez: “Me siento dueña de mis palabras”

Después de más 25 años de carrera, numerosos éxitos a sus espaldas y reconocimientos como el Grammy Latino, Mala Rodríguez es una de las artistas más importantes de la música urbana en castellano. Ahora, el próximo 11 de febrero, en la Sala Mozart, la conocida rapera sevillana traerá a Zaragoza su show Lujo Ibérico Unplugged, después de veinte años de su disco original.

Se trata de un acústico íntimo y muy personal en el que reinterpretará las canciones, mostrando antes que nada ese gran potencial y talento que la ha acompañado por todos estos años. He tenido el placer de charlar con la artista para hablar sobre el concierto y sus nuevos proyectos, que saben totalmente a nuevo comienzo.

Tal como están las cosas, poder hacer la actuación en la sala Mozart, el próximo 11 de febrero, parece casi un sueño, ¿no?

Yo me disfruto mucho la música, la verdad. Todos los días saco con el equipo un rato para cantar y componer. Es una forma de estar conectado constantemente con el trabajo. Las personas que lo tienen dentro, no pueden dejarlo en ningún momento. Y ya  poder compartirlo con el público, es lo más de lo más de lo más.

Desde el 2011 no vuelve Mala Rodríguez a Zaragoza, una ciudad que ha dado tanto talento en el rap, como Kase.O, Rapsusklei, Xhelazz. ¿Cómo te sientes al regresar? ¿Ha tenido alguna influencia sobre ti toda esta escena?

Me encanta, me gusta mucho Zaragoza. Me recuerda a un viaje que hice cuando tenía quince años. Primero fuimos al Monasterio de Piedra y luego fuimos a Zaragoza. De la ciudad recuerdo mucho los graffitis. Es una ciudad a la que le tengo mucho cariño.

Has declarado varias veces que eres una persona a la que le gusta vivir el momento. Sin embargo, ¿cómo has decidido volver a Lujo Ibérico convirtiéndolo en un show?

En el año 2020 muchos planes se torcieron, entre ellos, un documental que celebraba los veinte años que hacía con Lujo Ibérico. Y como no pudimos rodarlo por las circunstancias de la pandemia, se me quedó el gusanillo. Así que a raíz de ello, preparé un acústico.

Dentro de las circunstancias y posibilidades de cada uno, animo a que la gente se atreva a hacer cosas.

¿Cómo nació?

Nació de fiesta, con una amiga, probando cosas y dejándome llevar.  Al final, dimos con un resultado muy bonito que me encantaría poder compartir con todo el mundo. Revisar mi trabajo con el tiempo ha sido una experiencia muy enriquecedora y bonita.

¿Y qué has descubierto en este redescubrimiento de Mala?

He descubierto que son canciones con mucho poderío, como recién producidas ahora. Creo que son temas muy frescos que todavía hablan de nuestro presente. Aunque personalmente, soy más fuerte y consciente de todo que antes. Porque a veces uno cuando escribe, no sabe muy bien lo que está diciendo. Pero hay letras que son premonitorias, otras que hablan de un momento que a penas recuerdas o prefieres no recordar. Y con este álbum, me he visto super representada y unida en cada una de las frases.

También parece que estamos viviendo un momento que, entre confinamientos y restricciones, nos lleva a enfrentarnos a nosotros mismos.

A mí me gustaría que pudiéramos crecer emocionalmente, que no nos quedáramos con una única lectura de todo lo que está pasando, que tratemos de superar el miedo, que ahora mismo es muy fuerte. Y dentro de las circunstancias y posibilidades de cada uno, animo a que la gente se atreva a hacer cosas y vuele todo lo que pueda.

Creativamente, a raíz de la retrospectiva, ¿sigues componiendo igual que la Mala de hace 25 años?

Totalmente, de hecho, no paro nunca. Me encanta ir al estudio, sentir que existe un diálogo interno, que surgen cosas, que cuento con gente distinta para contar experiencias nuevas… No sabes lo afortunada que me siento por seguir sintiéndome viva y dueña de mis palabras.

¿Cómo has querido plantear las canciones en la puesta en escena?

Es una guitarra y voz. ¿Sabes qué ocurre? Que cuanto más desnudas algo, más muestra su poderío, y no necesita nada más porque todo está ahí.

¿Cómo ves el hip hop ahora y las escenas que se están produciendo actualmente?

Me encanta, porque es muy versátil. Hay muchas propuestas y escenas distintas, desde los más tradicionales hasta los que son más nueva ola. Hay de todo y eso debería ser lo normal: que la gente se exprese, sin cuadrículas. Odio las etiquetas, los nombres de las enfermedades… No me gustan nada. Prefiero pensar que tengo que estar bien y que yo soy yo. Si sientes que tienes que hacer algo de una determinada manera, hazlo. No esperes ningún formulario de entrada.

El ser humano a veces es muy cruel consigo mismo, clasificándolo todo y poniéndole un membrete.

Las etiquetas son necesarias, pero nos pueden fastidiar. Prefiero hacer y luego ya veremos si gusta o no gusta, o si me siento feliz con lo que estoy haciendo. Sobre todo, en relación al arte, que se trata de expresar aquello que tú filtras.

Odio las etiquetas, los nombres de las enfermedades…

Actualmente, ¿con qué sonidos se está identificando Mala Rodríguez?

A mí me gusta la música que me transmite alegría, emoción y pasión. El nuevo álbum tiene muchas letras que son bastante emotivas, y que tiene mucho que ver con la pasión, el dolor, la alegría… emociones humanas, en definitiva. Ahora mismo estoy explorando una parte de mí que hasta ahora no había explorado. Cuando era joven, estaba más en la onda de lo social, confrontando y dudando de todo, como cualquier adolescente, pero muy lejos de una línea de pensamiento más hedonista y relajada. Ahora prefiero probar diferentes estilos y géneros musicales. Intento no cerrarme a nada. Me gusta el cachondeo, reír, amar, hablar claro, jugar, y eso es lo que ahora quiero compartir y no ser un puto telediario.

Aparte de que ahora mismo parece que todo el mundo se ha vuelto un telediario.

A ver si conseguimos que la sociedad se enriquezca más emocionalmente y tenga más herramientas para sobrellevar esto, porque hace mucha falta.

¿Qué mensaje o consejo daría Mala a todos los artistas que están pasando ahora un momento tan complicado a causa de la pandemia?

Les diría que pasen de todo y hagan lo que ellos crean y sientan. Que escuchen su voz interior y que no tengan duda de que si están haciendo algo es por una razón importante. Pero sobre todo, que no tengan miedo.

Para terminar, ¿qué podemos esperar de Mala Rodríguez en el futuro?

Muchísimas cosas. Tengo una mente muy creativa y no paro de hacer cosas. Próximamente tendréis noticias de proyectos con los que espero sorprenderos. Y como en las crisis, esta es una oportunidad para sacar algo nuevo de mí, y así es como me lo estoy tomando ahora. Pero siempre dando las gracias por todo. Gracias, gracias y gracias. Esa es la clave.

Gracias, Mala.