Creada por Simon Rich (Saturday Night Live), la nueva sitcom del canal FXX es negra, cafre y muy divertida.
Escribía el otro día el crítico de televisión Adam Smith (Boston Herald) que el principal problema de Man Seeking Woman, la nueva sitcom del canal FXX, era que mucha gente no la “pillaría”. Pese a que el resto de su análisis concuerde bastante con lo que opino sobre esta nueva serie de TV, difiero en esa apreciación de la incredulidad que pueda despertar este, cuanto menos, sorprendente proyecto.
Creada por Simon Rich (¡30 años!), uno de los guionistas más jóvenes jamás contratados por Lorne Michaels en Saturday Night Live -y que iría después a trabajar para Pixar-, Man Seeking Woman sigue la vida de Josh Greenberg después de que su novia le deje. Introvertido, despechado y con bastante por aprender, el nuevo objetivo de Josh es buscar una nueva pareja. Nada nuevo. Pues esperen que ahora viene lo bueno.
En una de las primeras escenas de Man Seeking Woman, la hermana de Josh organiza una cita a ciegas con una amiga escandinava que está de visita. Suena bien, ¿verdad? La sorpresa viene cuando el pobre Josh y nosotros, espectadores, descubrimos, sin dar crédito alguno, que la cita nórdica es en realidad un troll verde, inflado y horrible que no levanta más de metro-veinte del suelo. Tal cual.
Simon Rich aprovecha el tono bestia y sin tapujos de la stand-up comedy norteamericana (ya saben: Louie, Sarah Silverman, etc.); recoge otro tanto de la buddy-comedy (como las irreverentes colegas de Broad City); y experimenta después con la cultura pop, ya sea en formato sketches, como hacen Fred Armisen y Carrie Brownstein en Portlandia o el equipo de guionistas de Padre de Familia, o a una escala más épica, a lo Rick and Morty. El resultado es una serie repleta de estupideces y chistes malos, pero también de la comedia más negra que pueda uno estamparse en la cara.
La inabarcable bandeja de WTFs que tiene preparada Rich para Man Seeking Woman, a juzgar por el ya emitido segundo episodio de la serie, será sin duda una de las mejores razones por las que aguantar junto a Josh, sus amigos y ese mundo tan cafre que les rodea. Lo que habrá que preguntarse es lo mismo que encabezaba el post: ¿”pillarán” los espectadores el tono y los gags de Man Seeking Woman? Entenderlos los entenderán, pero falta que quieran hacerlo. A mí, con Hitler (!!) y el corazón de peluche poseído que exige que le coman la polla (!!!) ya me tienen más que ganado.
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