Un cartel apabullante de primeros nombres de la escena actual, nacional e internacional, conforman el programa de Temporada Alta 2014. Pero atención, también está plagado de interesantes propuestas de artistas no tan conocidos que bien merecen un alto en el itinerario de la cita gironina.
Será Sol Picó quien inaugure el extenso programa el día 3 de octubre en la sala La Planeta con One-it wonders, el solo recién montado para festejar los 20 años de su compañía. Con puntas, moderna y aflamencada, así se muestra la coreógrafa y bailarina, que hace un repaso por sus fértiles dos décadas de trayectoria (en una próxima entrega os ofreceremos una entrevista para hablar de su momento actual). Algunos extractos de piezas tan exitosas como Bésame el cactus, El llac de les mosques o Paella mixta (hay que recordar que, aunque afincada en Barcelona desde los 80, Picó es una alcoyana militante) articulan esta propuesta.
El festival, o temporada, con sede en Girona y la vecina Salt, acoge en sus dos meses de generosa exhibición (más de 90 espectáculos/conciertos) algunas piezas que ya hemos podido disfrutar en otros escenarios. Es el caso de Rusia, el viaje coreográfico de La Veronal al frío, obra llena de guiños, antitópicos y de referencias literarias y cinematográficas de resultado inquietante y sarcástico. Del mismo núcleo de jóvenes autores que La Veronal surgió El Conde de Torrefiel, colectivo que mezcla inteligentemente el texto con el movimiento o el video, siempre al servicio de piezas de un lenguaje rompedor que les está llevando a convertirse en unos de los imprescindibles de la escena comtemporánea. La chica de la agencia nos dijo que había piscina en el apartamento, de Pablo Gisbert bucea en la insatisfacción permanente como denomimador común social.
El flamenco estará muy bien representado. Un incombustible Israel Galván, activo en varios frentes artísticos, estrenará un solo, Fla.Co.Men, que parece indicar ya con el título una nueva vuelta de tuerca en su deconstrucción del flamenco ortodoxo para hacerlo propio, único y grande, esta vez releyendo extractos de piezas propias pero centrándose en los aspectos sonoros. Otra flamenca soberana, María Pagés, amiga de los intercambios y las mezclas, bien sea con Barisnhikov, con Sidi Larbi Cherkaoui, José Saramago o con Oscar Niemeyer, ha contado en la dramaturgia con el escritor marroquí El Arbi El Harti para, a partir de un verso de Sor Juana Inés de la Cruz, montar el solo Óyeme con tus ojos.
Israel Galván, foto de Hugo Castillo
L’Incontro, de dos coreógrafas de la talla de María Muñoz y Raffaella Giordano promete emoción y calidad al sumar dos trayectorias extensas y riquísimas en investigación y creación. Con la misma feliz circunstancia del reencuentro, la bailarina de orígen indio Shantala Shivalingappa bailará al ritmo de la música de raíz antigua de Ferran Savall, hijo de Jordi Savall.
En el apartado de los talentos más jóvenes, la sorprendente bailarina Lali Ayguadé llevará a escena versos de Machado en Saba, podremos conocer las propuestas de Aimar Pérez Galí y María Campos y la ironía siempre gamberra de Pere Faura hará acto de presencia en Sin baile no hay paraíso, recorrido varipinto por algunos de los estilos y escenas de baile más conocidos por todos.
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