Encontrar el equilibrio entre las variables tiempo y dinero en nuestro día a día requiere de un ejercicio de reflexión, de concedernos un tiempo muerto para poner la atención en nuestros deseos y decidir vivir la vida que realmente queremos.
De todas las frases que no me gustaría componer a pesar de que lo hago de manera constante y abierta es no tengo tiempo. Otra frase que suelo escuchar muy a menudo es ganar dinero. ¡Se me ocurren tantas frases que no me gustan!
Jugueteando con ellas se podría decir no tengo dinero o también ganar tiempo. Por desgracia, son dos frases que, con cierta frecuencia, pasean por las calles de mi vida como un quejío. Seguramente, como plantean los matemáticos, en el límite, cuando éste tiende a infinito, nos encontraríamos con que no tener es ganar y algo así como el tiempo es oro. ¿Será cierto esto?
La cantidad de tiempo y de dinero que he utilizado en esta vida para defender lo que tenía es incalculable. Y eso sin contar el tiempo utilizado para ganar más dinero y tener más cosas que luego, con algo de tiempo, he tirado al contenedor. En fin, parece que, ganar, tener, tiempo y dinero forman un bucle de difícil gestión.
Recuerdo momentos espectaculares en mi vida en los cuales el tiempo no ha sido una variable, momentos de pasión, de diversión, de disfrute, de risas, de amigos, de conversaciones en la intimidad, de trabajo interesante… el tiempo ha desaparecido cuando estaba disfrutando de aquello que me gusta y ¡barato, barato!
Y no me olvido de que una película aburrida consigue eternizar el tiempo y que los minutos parezcan horas, que una reunión de trabajo con cientos de chorradas me duermen y paran el tiempo de verdad o cenar con gente por compromiso, tener ganas de irme y no encontrar en momento de salir porque el tiempo también se paró….y ¡caro, caro!
Me da la sensación que la percepción del valor del tiempo y del dinero únicamente depende de nosotros.
Me empeño en ganar tiempo al tiempo para hacer aquello que me gusta y que rara vez hago. Me he hipotecado, estrangulado y encarcelado en actividades para ganar más dinero que quizá no me gustan mucho y me ocupan demasiado tiempo. Y a eso le he llamado calidad de vida. Quizá ese tiempo se me va entre los dedos de las manos casi sin darme cuenta, con cientos de whatsapp al día para sentirme importante, para seducir, para jugar o para salvar los momentos aburridos de la oficina; con cientos de consultas de Facebook para ver la vida de los demás, porque quizá la mía no tiene mucho atractivo; con decenas de fotografías y comentarios de twiter, instagram, 500px o Line o haciendo zapping enfermizamente cuando llego a casa cansado, sin posibilidad de centrar la atención en nada… Quizá mucho del dinero que gano no lo disfruto ni en mí, ni con las personas que quiero, sino que lo utilizo comprando seguridad, posición social o pagando el importe de estar a la moda en todo. ¡¡¡cada uno sabrá a qué dedica el tiempo y el dinero libre y la satisfacción que obtiene de ello!!!!! Pero , para mí, es triste que las frases de moda sigan siendo no tengo tiempo y necesito ganar más dinero.
Quizá ganar tiempo y no tener dinero, me pueda llevar a espacios desconocidos para mí, quizá me asusta o aterroriza, pero creo que todo en su justa medida puede descubrirme el equilibrio en mi vida. Reflexionar es gratis y puede que encuentre alguna solución para tener el tiempo y el dinero que deseo. Lo cierto es que si no me tomo un tiempo para saber el dinero que quiero ganar y cómo deseo distribuir los 86.400 segundos de los que dispongo cada día difícilmente podré encontrar ese equilibrio.
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