Del 10 al 20 de noviembre, el cine de ciencia-ficción, fantástico, terror y las últimas rarezas cinematográficas llegan, en su XIV edición, al cine Capitolio de Godella (Valencia). Cine periférico desde la periferia. Con la Semana de Cine Fantástico y de Terror de San Sebastián y L’Étrange Festival de Paris como referentes, Catacumba Film Festival da un paso adelante en 2016, sin perder el desenfadado espíritu con el que nació a principios de siglo: compartir pelis con los colegas en una sala de cine.
Directores consagrados y nuevos realizadores se combinan en una programación de 67 films de 19 nacionalidades, entre largos y cortometrajes, que compiten por las singulares estatuillas del festival: los Fetos de Oro del público y el jurado y la Muñeca Rota al cortometraje más entrañable (se han presentado 509 cortometrajes) con que la organización premia el ingenio de trabajos realizados sin apenas medios ni presupuesto. Con la idea de fomentar la producción cinematográfica el festival reparte, además de las estatuillas, dos mil euros en premios.
La variada programación incluye dos matinées dominicales de cine de animación para los más pequeños —Nocturna y El niño y el mundo—, un ciclo dedicado al stop-motion y otro a la filmografía valenciana, en el que serán proyectados los últimos trabajos de los directores Ferrán Brooks, Miguel Ángel Font, Belén Riquelme y Víctor Palacios, entre otros.
Catacumba Film Festival también reserva espacio para formatos híbridos y desconcertantes, como el cine-concierto de clausura, en el que la banda post-punk Perra Lobo pondrá banda sonora en directo al clásico del cine mudo El castillo de los fantasmas (Au Secours, Abel Gance, 1924). O el ya tradicional Certamen Internacional de Gritos, en el que las laringes más desgarradas se baten en público para emitir el alarido más atronador.
De Jeremy Saulnier al Chico Morera. De Deathgasm a Crumbs, rareza hispano-etíope-finesa dirigida por Miguel Llansó. Catacumba Film Festival servirá también para el estreno del cortometraje valenciano Mom (Ferrán Brooks) y será antesala de la llegada a las salas comerciales del largometraje estadounidense The Dark Tapes y de El extraño, del surcoreano Na Hong-Jin, recientemente premiada en Sitges por la mejor fotografía.
En la programación tienen cabida reflejos de una realidad compleja, con argumentos que no siempre resultan ser tan ficticios y films que desbordan las narrativas convencionales y las recurrentes etiquetas de estos géneros cinematográficos. Se proyectarán filmes que versan sobre identidades, los límites del yo, la pérdida, los anhelos, la violencia, pero también sobre el amor y su ausencia, como las complejas relaciones entre nuestras entrañas y los vínculos con el mundo exterior que se entretejen en Cuerpo (Malgorzata Szumowska, Polonia, 2015), recientemente premiada con un Oso de Plata en el Festival de Cine de Berlín, pero también la sencillez de la puesta en escena de Coherence, de James Ward Byrkit, que nos introduce en el juego espacio- temporal de una experiencia errática, sin apenas mover a los personajes de casa, como si del mismísimo ángel exterminador de Buñuel se tratara.
Destacamos también la magistral La invitación (premio a la mejor película en Sitges 2015), donde la realizadora Karyn Kusama coloca a sus personajes en situaciones límite con imposibilidad de redención; Películas que sorprendentemente se cuelan en la programación del Festival de Cannes, como la transgresora Green Room (Jeremy Saulnier, 2015), cuya crítica podéis leer aquí, en la que el movimiento punk colisiona con la ideología neonazi y que escandalizó a los más avezados de la industria cinematográfica en su última edición.
La programación completa se puede consultar en www.catacumba.org
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