El rockero norteamericano Bob Wayne, fiel legatario de Johnny Cash o Waylon Jennings, pasea su sólido sexto álbum en nuestro país con su aguerrida visión del género como mejor argumento.
Se le considera un fiel representante del outlaw country. O lo que es lo mismo, esa rama del género plagada de historias de forajidos y personajes siempre sorteando lo legal, que tanto predicamento tuvo desde finales de los años 60 gracias a Willie Nelson, Waylon Jennings, Kris Kristofferson y, sobre todo, el reverenciado Johnny Cash.
Fue precisamente un concierto del hombre de negro lo que le cambió la vida, una suerte de epifanía decisiva desde que pudo verle sobre un escenario apenas rebasados los once años, de la mano de su madre. Y no es de extrañar este cúmulo de referentes, si atendemos a las trazas de este compositor criado cerca de Seattle, que se declara también abiertamente fan de bandas de rock de alto octanaje como Neurosis o TAD, y que incorpora parte de ese background hercúleo a unos códigos siempre necesitados de vías de ventilación.
Con todo, sus seis álbumes hasta la fecha tampoco se desmarcan en exceso del influjo de sus referencias. La última prueba es el sólido Back to the Camper (Century Media), un trabajo en el que vuelven a predominar los banjos, la pedal steel guitar, los violines, los medios tiempos y también esas trotonas andanadas hillbilly tan inherentes al estilo que practica, aderezadas con unos textos que rezuman vidas al límite e invocaciones a la espiritualidad más oscura.
Parte del mejor jugo del álbum reside en algunos de sus duetos, como los deliciosos tête à tête que mantiene con Elizabeth Cook en 20 Miles to Juarez o con Molly Conley en Showdown, así que es una incógnita saber si alguien le dará la réplica femenina en la gira hispana que ha emprendido esta misma semana.
Comenzó la semana pasada por Cáceres y Zaragoza, continuó el martes en la sala Acapulco de Gijón, y tras pasar ayer por Cangas Do Morrazo (Pontevedra), prolonga su periplo esta noche en el Jardín de Falerina Lorategia (Vitoria), mañana en la sala El Sol de Madrid, el sábado en el Loco Club de Valencia y el domingo en la Rock Sound de Barcelona. Una cita indispensable para los amantes de los sonidos de raíz americana en su vis menos adulterada.
Nadie ha publicado ningún comentario aún. ¡Se tú la primera persona!