Cuando la artista alemana Pina Bausch nos dejó huérfanos en 2009, mucho se habló sobre el futuro de su compañía, el Tanztheater de Wuppertal, y de la transmisión de su memorable legado. Cinco años después, la formación con la que desarrolló su inmortal universo creativo sigue activa y en plena forma, gracias al trabajo de
Más allá de pasodobles y boleros, la edad no es una barrera para bailar y formar parte de un proyecto artístico. La gente mayor se sube al carro de la creación contemporánea y de la danza comunitaria. Aurora, Pepita, Teresa,… todas son mujeres en torno a los 80 años, alguna ronda los 90, se las
Coger a un grupo de adolescentes y hacerles expresarse mediante el baile tiene resultados tan explosivos como hermosos. La película Five Days to Dance se estrena esta semana y recoge este proceso, pero tenemos otros filmes recientes que tratan el tema con resultados increíbles. La muchacha expresa sus dudas con la mirada, esquiva y algo escéptica.